La auténtica fidelidad se ha perdido. Uno de los serios problemas del mundo contemporáneo es la pérdida de la auténtica fidelidad. Se dice que hay dos animales que tienen esta virtud: el perro y el caballo. En este artículo se hablará de alguien que en realidad está dotado de de ser un auténtico amigo fiel y que aun expone su vida por otro.
Entre las personas se ha perdido la fidelidad tanto que los amigos lo son sólo por intereses personales, pero en el momento difícil se suele quedar en la más cruenta soledad. En la historia de que se ocupa este artículo sí se ve que puede todavía existir la fidelidad y no precisamente de un ser humano.
Es increíble que la fidelidad de un perro le lleve a permanecer cerca de su dueño por espacio de 30 minutos, expuesto al frío de un lugar de aguas congeladas donde se puede imaginar que la temperatura tan baja sería uno de los más fuertes impedimentos para permanecer en aquel inhóspito lugar.
El acontecimiento se dio lugar con un hombre de 60 años que se salió con su perro a pasear sin pensar en lo que se le pudiera presentar, cuando más divertido estaba, su perro comenzó a perseguir uno de los patos que se encontraba en aquel lugar buscando abundante agua donde poder nadar.
De un momento a otro en forma inesperada el perro comenzó a hundirse en función de que el hielo se rompió, por lo que el hombre acudió en ayuda del indefenso animal, pero ahora el perro logra salir y quien se queda atrapado es el hombre sin saber qué camino coger, sólo le salvaría la auténtica fidelidad.
Lo único que salvaría al hombre sería la virtud de fidelidad de su perro, no es que el perrito fuese capaz de sacarle del lugar donde se encontraba atrapado por bloques de hielo, sin embargo cuidaría de él hasta que llegaran organismos de socorro a auxiliarle y sacarlo para que la hipotermia no acabara con su vida.
Por fortuna entre fidelidad auténtica y amistad salvan al hombre
Unida a la auténtica fidelidad de su perro, el hombre contaba con la amistad de personas que vivían por este sector; cuando alguien se dio cuenta del incidente, de inmediato hizo una llamada al 911 para que los bomberos vinieran a socorrer al hombre en peligro de muerte de hipotermia por baja temperatura.
Tres son los elementos que salvan al hombre de la muerte: en primer lugar la auténtica fidelidad de su perro, en segundo lugar la amistad con personas que llamaron al 911 para que vinieran organismos de socorro para auxiliarle y librarle de la muerte por hipotermia y tercero la diligencia de los bomberos.
Lo que más se desea resaltar en este artículo es la cualidad que el perro tuvo frente a un incidente que en manos de otro hubiese salido corriendo, pero él le acompañó hasta verle salir del peligro en el que se encontraba, hoy puede ser que este video deje un ejemplo en cada uno de los que lo leen.