Hace unos días murío el padre de la fregona, el ingeniero Manuel Jalón Corominas, falleció en Zaragoza ciudad de la que fue nombrado hijo adoptivo en 1992, aunque previamente vivió en Estados Unidos o en Finlandia, donde trabajó después de obtener el título de ingeniería aeronáutica -en Madrid- y de escribir su tesis doctoral sobre accidentes aeronáuticos.

A Zaragoza llegó para trabajar en la base aérea, pero pronto cambió su rumbo laboral y en 1958 creó la empresa de fregonas aragonesa Manufacturas Rodex y otra de exportación de jeringuillas desechables, Fabersánitas, de la que fue director.

Jalón puso a la venta las fregonas de uso doméstico e industriales para grandes superficies, un elemento que «levantaría del suelo a la mujer española» y erradicaría «las enfermedades que afectaban a las rodillas, las manos y la columna vertebral de las profesionales de la limpieza». Exportó fregonas a treinta países, según se cuenta en una biografía del inventor en la página de internet ‘www.fregona.es’.


La verdad es que muchísima gente tiene que agradecer a el señor Jalón sus grandes inventos, no me hago a la idea lo que sería para aquellas mujeres el coger el barreño o pozal y ponerse de rodillas para limpiar los suelos, todos los problemas tanto físicos como dignos que representarían.

De nuevo, ¡¡mil gracias por tus inventos!!

Firmado: @capazos

por nemi

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