Kelvys Simao dos Santos, un tierno niño de tan sólo dos años de edad fue declarado muerto en un hospital en su país natal, Brasil, tras lo cual estaba siendo velado por sus más cercanos familiares y amigos en un sector muy humilde al norte de Brasil, durante la velación el niño despertó y pidió un vaso de agua a sus padres, quienes quedaron estupefactos con el evento.
Kelvys Simao dos Santos, el niño que despertó durante su funeral.
Kelvys Simao dos Santos despertó durante su funeral, llevado a cabo en una humilde localidad ubicada en el norte de Brasil, al despertar el pequeño niño pidió un vaso de agua a sus padres, tal lo cual, estos le llevaron de urgencia de nuevo al hospital, tras lo cual el niño murió «de nuevo».
Esta es la información de los medios locales que siguieron los hechos el pasado jueves. El diario local Diario de Pará, del estado del norte de Brasil en el cual residía el pequeño niño, asegura que el acontecimiento sucedió entre el espanto, las oraciones, los agradecimientos, las lágrimas, la conmoción y los desvanecimientos de algunos de los asistentes.
La prensa de esta localidad también asegura que durante el acto de velación, el pequeño niño había empezado a moverse dentro de su ataúd y que incluso llegó a sentarse en el mismo tras escupir un poco de algodón que mantenía en el interior de su boca.
El diario Folha de Sao Paulo, asegura que luego de despertar, el niño inmediatamente pidió un vaso de agua a sus padres, y luego de beber el agua, fue llevado de emergencia al hospital al cual llegó, lastimosamente, muerto y tras este segundo dictamen médico, el niño fue enterrado.
El diario Folha asegura que la policía civil iniciará investigaciones con el objetivo de concluir si el niño fue declarado muerto por primera vez, tras un error en el diagnóstico médico.
Detalles de los acontecimientos.
Kelvys Simao dos Santos de dos años de edad había sido ingresado al hospital con una insuficiencia respiratoria, con deshidratación y neumonía tras lo cual fue declarado fallecido.
Los médicos aseguran que el pequeño niño había dejado de respirar durante su tratamiento, tras lo cual fue declarado muerto durante la noche del jueves anterior tras lo cual el cuerpo del niño fue llevado a la residencia de sus padres para realizar el proceso de velación.
El padre del niño, Antonio dos Santos, asegura que el niño se levantó una hora antes de su entierro y pidió que le dieran a beber un vaso de agua, también asegura que pensaron que era un verdadero milagro, que todos empezaron a gritar en el lugar y que lo que veían parecía completamente increíble.
Luego el niño volvió a recostarse sin que pudieran hacerle despertar de nuevo y llevándolo rápidamente al hospital Abelardo Santos en Belem el niño fue examinado nuevamente y donde dictaminado una vez más que carecía de signos vitales.
El padre del niño asegura que en el centro médico no obtuvo explicación alguna sobre los hechos sucedidos y por lo tanto quiere descubrir la verdad sobre el primer y equivocado dictamen.