Siempre se ha dicho que el internet cada día se apodera más del mundo, y sin darnos cuenta al parecer también de la conciencia de nuestros jóvenes.
No sé hasta qué punto se puede considerar una adicción a algo que posee por igual medida herramientas de trabajo, personalmente no podría trabajar sin la señal de Wi-fi, pero no creo llegar a ningún tipo de extremo por conseguirla.
Lo contrario les sucede a algunos que al parecer no tienen la paciencia suficiente para entender las diferentes calamidades que se pueden presentar y terminan estrellando el computador contra las paredes, o cosas por el estilo.
He escuchado sobre muchos casos que tienen su raíz en la locura por el internet, pero creo que hasta hoy escucho una historia como la que les voy a narrar y lo hago porque me parece necesario que todos caigamos en cuenta de la necesidad establecer prioridades en nuestras vidas.
La locura por el internet es un tema complicado.
Si bien los padres tenemos la obligación de hacer de nuestros hijos personas de bien; la obligación de ellos es entender esto y por lo tanto aceptar las condiciones que se les imponen; en Benicassim un joven amenazó a su madre por apagarle la señal de Wi-fi con un hacha; al parecer mientras la madre le mandó a estudiar, el joven no hizo caso, entonces ella desconecto la señal y esto enfureció al joven.
En medio de su locura por el internet tomó el hacha y empezó a romper todo lo que a su paso encontraba en la casa, a tal punto que la señora decidió llamar a la policía, y al llegar se encontraron con el joven enceguecido, pero al parecer ni siquiera la presencia de los policías logró persuadirlo y en presencia de ellos amenazó a su madre con el hacha.
Es entendible que para los jóvenes la tecnología es más que una herramienta de trabajo, es un estilo de vida, aunque no se puede generalizar, porque evidentemente son muchos los chicos que sane asumir los retos que la actualidad les propone, pero en este momento me quiero referir a aquellos a quienes no les ha importado cambiar su escala de valores por estar sentados frente a un computador todo un día.
La locura por el internet un asunto que nos compete a todos.
Las cosas no son iguales y tal vez nunca lo serán, las adicciones no son sólo cosas de muchachos, también existen gran cantidad de adultos que en busca de un placer personal terminan con toda una vida de sacrificios, para quedar finalmente solos, pues nadie aguanta las adicciones de otro.
De seguir así, pronto se contagiará al mundo la adicción y será inevitable la locura por el internet, que lleva a cometer actos como el del joven de los que ya ni siquiera se asombrará el mundo.
Aún es tiempo de tomar conciencia y medir los tiempos, sería absurdo pedir que se eliminará algo tan útil como el internet, pero si que se tome con plena conciencia de los beneficios y las amenazas que representa.