El racismo en la Eurocopa 2012.
Actos de violencias contra Balotelli.
Continúa el racismo en la Eurocopa 2012, el mal al que tanto miedo le han tenido los organizadores de la Eurocopa, sigue cobrando fuerza entre los aficionados del fútbol en este país, un mal del que debimos habernos librado hace mucho tiempo, un acto vergonzoso de intolerancia azota uno de los deportes más bellos del universo, el fútbol.
La víctima en esta ocasión ha sido Mario Balotelli, blanco contundente de ataques racistas desde que inició el magno torneo, esta vez los hinchas croatas le aventaron un plátano, la fruta fue retirada inmediatamente del estadio por un trabajador del mismo, según ha afirmado el fotógrafo que presenció la escena.
Lastimosamente, a parte del ataque simbólico con la banana, los aficionados gritaron la palabra «mono» repetidas veces, cada vez que el delantero italiano tocaba el balón. Un vocero de la Federación italiana de fútbol, ha mostrado su inconformidad ante el suceso, por lo tanto, la UEFA se encuentra en espera de los informes que aclaren lo sucedido, con el objetivo de tomar una decisión apropiada al respecto.
Antes de inicio del partido Italia «“ Croacia, los hinchas croatas cometieron actos de intolerancia, al quemar una bandera de la Unión Europea, en aquella ocasión también mostraron símbolos fascistas y durante el encuentro, arrojaron botes de humo a la cancha que provocaron la interrupción del ritmo normal del partido.
El racismo en la Eurocopa 2012.
Antes de iniciar el torneo.
Antes de iniciar el torneo el racismo en la Eurocopa 2012 ya se hacía evidente, los jugadores holandeses fueron víctimas de las burlas de un grupo de aficionados polacos durante su entrenamiento.
En aquella ocasión la federación holandesa de fútbol, la cual no presentó querella ante la UEFA, y que se proclamó diciendo que estos habían sido «incidentes aislados de cánticos racistas» y que tomarían medida en caso de repetirse de nuevo.
La UEFA hasta el momento no están ejerciendo ningún control, o al menos estos no parecen estar dando resultados, mientas la integridad de los deportistas y el respeto a su buen nombre, siguen viéndose vulnerables ante este tipo de irrespetuosas y absurdas manifestaciones.
Los jugadores siguen mostrándose apáticos ante este tipo de manifestaciones y se sienten realmente desprotegidos ante la situación, los controles no están dando resultado y definitivamente la UEFA no toma medidas radicales al respecto.
En aquella ocasión el jefe de prensa de la UEFA, Alexandre Fourtoy, afirmó: «Ambos países han trabajado muy duro para organizar este torneo, y no deberíamos molestarlos porque 10 personas estaban entonando cánticos (racistas) en un estadio».
¿Será que hasta el momento siguen siendo 10 personas gritando cánticos? ¿Será que los jugadores se sienten completamente cómodos con la situación? Y mejor aún ¿hasta que punto tienen que llegar las manifestaciones de racismo para que creen una solución realmente efectiva?
No se trata de una buena o mala organización de un torneo, el espectáculo, la alegría y la organización del evento en general han sido estupendos, pero esto no representa que se dejen de lado pequeñas alteraciones de orden público que pueden desembocar en actos peligrosos de intolerancia.